La Conselleria de Medi Ambient de la Generalitat presentó esta semana las conclusiones que sus técnicos han sacado tras analizar los datos extraídos de 141 puntos de medición en la región metropolitana de Barcelona. La principal es que, con respecto al 2007, las partículas en suspensión PM10 (de diámetro inferior a 10 micras) se han reducido un 13%, mientras que el descenso del dióxido de nitrógeno (NO2) ha sido del 6%, pese a lo cual todavía sigue estando por encima de la normativa de la Unión Europea.Sabiendo de antemano el general escepticismo con que serían acogidos sus datos por la polémica ciudadana creada alrededor de la limitación a 80 kilómetros por hora en las vías rápidas de acceso a Barcelona, Medi Ambient se apresuró a explicar que en estos datos ya se contabilizan los efectos de la crisis e, incluso, las diferentes condiciones meteorológicas que caracterizaron tanto el 2007 como el 2008.
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